Justo Barreàz Pérez
Generalmente no se tiene una formación para aceptar con responsabilidad lo que implica tener nuevos medios tecnológicos en la educación ya que es bien sabido que la tecnología es una herramienta de apoyo para la instrucción sin embargo, por actitudes negativas hacia esta técnica y por la falta de responsabilidad que conlleva el uso de esta, ha hecho que en muchas escuelas no sea utilizada de la mejor manera por los docentes, lo que permitiría a los alumnos eliminar la creencia errónea de que el profesor es la única guía en el proceso del aprendizaje.
En el caso de que ya se haya asumido esta responsabilidad la curricular escolar se permite el uso de las tecnologías, por lo que sería fundamental para que el proceso de aprendizaje se vea beneficiado; hacer algunas modificaciones que permitan que se utilice como apoyo a este procedimiento el uso de la tecnología además de las clases presénciales.
Como hemos podido discutir en las clase que se refiere a este tema en el diplomado de Docencia Superior nos permite decir que los cambios acelerados y vertiginosos de la tecnología y la ciencia han provocado alteraciones en el entorno social y cultural. En el contexto tecnológico, las innovaciones digitales están ofreciendo oportunidades para ampliar las redes de comunicación, el acceso rápido y oportuno a la acelerada producción de la información y el conocimiento, con las redes telemáticas se puede trabajar con una gran variedad de personas, aun cuando no coincidan en espacio y tiempo. En el entorno social y cultural, la economía globalizadora, obliga a generar nuevas pautas del trabajo y formas de relaciones sociales.
Este panorama sociocultural representa importantes implicaciones en el ámbito educativo. Hoy más que nunca se demandan personas que sean capaces de procesar información, de comunicar ideas, de familiarizarse con el potencial tecnológico y capacidad para enfrentar retos. La nueva cultura del trabajo demanda, no tanto personas con un acervo completo de conocimientos, sino que ha tomando especial importancia otras competencias, como: ser capaz de comunicar ideas con claridad y precisión por la variedad de recursos técnicos, saber tomar decisiones, autodirigirse y construir su propio aprendizaje, esto a raíz de que los conocimientos y la información han tomado un ritmo impresionante; así como el tener voluntad para formarse y trabajar colaborativamente. Las habilidades de trabajo conjunto y la capacidad de aprender con otros se han convertido en elementos indispensables que el sector educativo debe desarrollar.
La introducción paulatina de las nueva tecnologías de la información y comunicación, han marcado revoluciones y retos en las prácticas educativas. No solo representan nuevas herramientas en apoyo al proceso de enseñanza aprendizaje, sino que han implicado un nuevo giro de los propósitos educativos. Ahora es preciso que la educación vaya aportando a los individuos los conocimientos, habilidades y actitudes para sobrevivir en la era de la información.
Como afirman Majó & Marqués (2002), “cuando la cultura y la sociedad cambian de manera significativa, la educación también debe cambiar para seguir desarrollando la función transmisora del patrimonio cultural, y esto ocurre ahora que estamos entrando a la sociedad del la información...”
Por otra parte, las NTIC introducen cambios en los métodos de enseñanza,
olvidándose del papel protagónico del maestro y dejando de ser la única fuente del conocimiento para los estudiantes. Así también los estudiantes, en un ambiente enriquecido por las recursos tecnológicos, tienen más posibilidades de aportar y compartir experiencias y conocimientos, favoreciendo el trabajo colaborativo. Existe una gran variedad de medios tecnológicos que se han incorporado a las prácticas educativas, y más en los últimos tiempos de la era de la información, desde los más sencillos y concretos, hasta los más sofisticados como el Internet y sus amplias posibilidades de uso. Se han generado muchas experiencias de la educción en línea gracias a las bondades del internet. Pero lo más importante es conocer ese recurso y aprovecharlo.
Más específicamente hablando, el correo electrónico, los chats, foros de discusión, las videoconferencias, encuentros virtuales, los simuladores y algunos otros son los medios más comunes y aprovechados para favorecer el aprendizaje colaborativo. El de correo electrónico es uno de los servicios más básicos de internet.